Hace un par de meses me comentaba una alumna nueva que ella había practicado yoga pero que dudaba de la formación apropiada por parte de quien le impartía las clases porque practicaba en un gimnasio como pack de la oferta de clases colectivas y que lo que hacía nada tenía que ver con nuestra manera de enfocar las prácticas. El lugar donde uno reciba las clases es independiente de la calidad y profesionalidad de las mismas. Es bueno informarse sobre la acreditación, títulos, tipo de formación, experiencia, enfoque, filosofía del centro, seguro de responsabilidad, etc... Cuando vamos a un médico o a un fisioterapeuta solemos consultar quiénes son, ¿porqué cuando quieres cuidar tu cuerpo no haces lo mismo? Como las casualidades no existen justo este mes leía la siguiente entrevista a Rodrigo Cáceres (Profesor de Yoga y Biomecánica del cuerpo) de la que te hago un resumen:
Pregunta : ¿Consideras que hay intrusismo en el mundo del yoga?
“Lamentablemente sí. Muchas personas que practican yoga por un tiempo se autoproclaman instructores sin tener conocimiento alguno de las técnicas que se requieren para estructurar y diseñar una buena clase. Esta práctica conlleva años de estudio y me alarmo cuando escucho que incluso hay escuelas que cuelgan las clases de yoga en internet para que cada cual practique en casa. No es posible formar a nadie como profesor tomando clases a través de una pantalla, sin un guía físico de verdad (...)"
Es muy importante encontrar un profesor, sala, o escuela sentirse a gusto pero también seguros, donde la formación de los profes y su nivel de práctica y experiencia te ayuden, te guíen y te sirvan de motivación. Ciertamente yo también me sorprendo de ver que hay personas, a las que yo no puedo considerar profesores, que sin tener una mínima formación a cerca de las actividades físicas, fisiología, anatomía, primeros auxilios, lesiones, patologías, se aventuren a impartir clases, seguramente con toda su ilusión y ganas, pero de manera muy irresponsable. Algunos creen que el llevar un tiempo practicando o hacer las posturas "bien", te cualifica para dirigir una clase, a otros les parece que es fácil y que no se requiere formación especial...
Llevo 22 años trabajando como profesora de diversas disciplinas y a día de hoy continúo formándome porque es mi pasión pero también mi responsabilidad para con quienes depositan su confianza en mis clases, para quienes se acercan con su dolencia o comparten conmigo su ansiedad, su insomnio, su situación... Momentos por los que yo también paso porque forman parte de las etapas de la vida de cada persona...
El yoga, la enseñanza del yoga, no está exenta de intrusismo profesional, de personas que ejercen sin la debida formación y experiencia, por eso es bueno que conozcamos que la enseñanza del yoga también requiere de una formación, experiencia y titulación académica acreditada. Para aquellas personas que me han preguntado mi punto de parecer a este respecto sólo puedo decir que para mi, además de una irresponsabilidad, es una falta de respeto hacia aquellos profesores que se forman adecuadamente y que no tienen trabajo, hacia todas aquellas personas que llevamos años estudiando, invirtiendo tiempo y dinero, aprendiendo acerca del cuerpo, las lesiones... quizás sea mi "ego profesional" como le comenté a una amiga, pero es como yo lo vivo. Tengo una fuerte convicción de que para ejercer como profesor de una disciplina o filosofía que implique conocimiento del cuerpo hay que formarse. Es mi pasión...
Pregunta: ¿Qué consecuencias tiene para quienes acuden a esas clases?
“Es una irresponsabilidad tremenda por parte de los instructores. La falta de técnica y formación anatómica puede provocar graves lesiones físicas a los alumnos e incluso muchas irreparables, hernias discales a lo largo de la columna vertebral, desgarros musculares, problemas en las articulaciones… Un profesional de Yoga debe tener varios años de estudios, mucha practica física constante, varios años de dar clases a grupos de personas. Debe hablar con un lenguaje muy técnico y dar instrucciones profundas y diseñar sus propias clases. Transmitiendo tranquilidad, confianza y seguridad en sus alumnos.”
A lo largo de cualquier práctica física es normal que aparezcan pequeñas lesiones, molestias, no siempre se está atento al 100% de todo lo que está sucediendo, a veces estamos más dispersos o pretendemos llegar a más cuando no es lo que le va bien al cuerpo en ese momento, sobrecargamos pero no le damos reposo suficiente al organismo... Siempre hay que escuchar y saber escoger más con cabeza y menos con el querer hacer más, y más... Es por todo ello que una buena base técnica en tu práctica y sobretodo una buena escucha, es primordial para ser conscientes de los limites y de cuando debemos adaptar la postura o tomarnos un descanso para permitir que nuestro cuerpo se recupere y nuestra energía se asiente. Puedes cambiar de práctica, cuando sientas que necesitas reposar, soltar, escoge una práctica de Yin Yoga, o lo que nosotros llamamos Yoga Bienestar es perfecta, una meditación... siempre hay opciones, caminar al aire libre o un baño en el mar....
Pregunta: ¿Para quienes está indicado el Yoga?
“Todo el mundo lo puede practicar, eligiendo su propio estilo. Hasta las personas con enfermedades crónicas pueden practicarlo, pero siempre con un profesor individual para que te ayude y te preste toda la atención. Hay que olvidar aquello de que es algún tipo de contorsionismo. Y también hay que olvidar que el Yoga es una disciplina, en realidad es todo un abanico de estilos y cada persona elige el suyo según sus necesidades y su práctica. ” ¿Qué le dirías a una persona que quiere iniciarse? ¿Y a la que duda si el Yoga es para ella? “En la iniciación al Yoga debe existir una buena introducción en la que se enseñe las partes del cuerpo con su lenguaje técnico, la respiración y la actitud que se debe tener ante la práctica (...)
Hablaba con alumnos que llevan ya años de práctica a cerca del estilo mejor para un principiante, creo que dependerá de lo que cada persona vaya buscando y del nivel de conciencia del cuerpo y trabajo físico previo pero, tras haber tomado clases durante años en algunos estilos (Hatha, Iyengar, Kundalini, Ashtanga, Vinyasa, Yin Yoga) creo que empezar con Hatha o yoga dinámico adecuado al nivel de experiencia, combinado con un yoga relajante (Yin Yoga, Yoga Bienestar, Yoga Restaurativo) es una gran opción. Una vez se tenga una base optar por el que a cada persona le apetezca más y cubra más las necesidades. Sobre todo si nos acercamos al yoga de cero, sin incluso tener ninguna experiencia con el deporte.
Dentro del yoga existen diferentes estilos y diferentes enfoques de las sesiones, así que prueba (una sola clase no es suficiente para saber lo que te puede aportar) pregunta a cerca de la formación del profesor, si tienes alguna lesión o patología pregunta si esa formación y experiencia es adecuada para tu situación, que el profes@r tenga formación en primeros auxilios...
Te dejo un resumen de los diferentes estilos:
Hatha Yoga, o Yoga físico (del que derivan los demás estilos físicos)
Raja Yoga, o Yoga mental
Karma Yoga, o Yoga de la acción
Bhakti Yoga, o Yoga de la devoción
Gñana Yoga, o Yoga del conocimiento